Esta medida afecta principalmente a las empresas maquiladoras y manufactureras de gran tamaño instaladas en la entidad, señaló dirigente del sector industrial.
Guadalajara, Jal. Las empresas que subcontratan personal, conocidas como outsourcing, no están recibiendo la devolución del Impuesto al Valor Agregado (IVA) debido a un criterio del Servicio de Administración Tributaria (SAT) en Zapopan, según manifestó el Colegio de Contadores Públicos de Guadalajara (CCPG).
El presidente del colegio, Luis Alberto García, indicó que la medida se adoptó luego de que “algunas empresas” emplearon estrategias “no lícitas” para obtener la devolución, por lo que la autoridad hacendaria procedió en consecuencia contra todas las compañías, incluyendo las que contratan personal a través de terceros (outsourcing).
Según García, el tema “no está regido bajo la Ley del IVA ni ninguna otra; simplemente es un criterio que se aplica a partir de que la autoridad conoció de casos en los cuales no procedía la devolución del gravamen”.
Por su parte, el presidente de la Comisión Fiscal del Consejo de Cámaras Industriales de Jalisco (CCIJ), Mario Nuño, indicó que el conflicto con la autoridad hacendaria se genera porque algunas empresas de outsourcing no están reportando el IVA pero sus clientes —las compañías que emplean sus servicios de subcontratación de personal—, sí.
“La posición del SAT es ir en una confrontación para quien no está cubriendo el IVA (…), y quien paga los platos rotos es quien solicita la devolución de este mismo impuesto”, dijo el también expresidente del CCPG.
Al respecto, el coordinador del CCIJ, Daniel Curiel, afirmó que “no es una resolución con la que estemos de acuerdo porque, cuando se contrata una empresa de outsourcing, al final de cuentas lo que se contrata es un servicio y no tendría por qué diferenciarse de la contratación de cualquier otro servicio”.
El dirigente del sector industrial en el estado afirmó que dicha medida afecta principalmente a las empresas maquiladoras y manufactureras de gran tamaño instaladas en la entidad.
Fuente: El Economista
