Entre el 19 y el 23 de febrero próximos, se realizará la I° Ronda 2018 de la Unión Aduanera Centro-americana, en la ciudad de Guatemala, según informó la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (SIECA), órgano técnico y administrativo del Proceso de Integración Económica de esa región.
Allí se espera la negociación final para que El Salvador se adhiera al proceso de unión aduanera, liderado por Honduras y Guatemala, según explicó la viceministra de Economía salvadoreña, Luz Estrella Rodríguez.
Desde el mes de octubre pasado, se llevaron a cabo entre las partes, una serie de encuentros de los equipos técnicos de los tres países, abordando los pasos necesarios para que finalmente se facilite el paso de mercancías en el Triángulo Norte de Centroamérica, nombre con el que se conoce el área de integración económica de los tres países centroamericanos (Guatemala, Honduras y El Salvador). Tienen firmados acuerdos comerciales con Colombia, EEUU y México.
Para el ministro de Economía de El Salvador, Tharsis López, “el presidente Sánchez Cerén tomó la decisión trascendental de incorporar a nuestro país en la Unión Aduanera que consolidan Guatemala y Honduras. Nuestro país muestra con ello su firme voluntad de lograr la Unión Aduanera del Triángulo Norte, bajo un enfoque permanente e integral que incorpore la modernización, estandarización y la homologación de procedimientos de las instituciones que intervienen en los puestos fronterizos, a fin de hacer una transición ordenada al libre paso de mercancías y personas”.
El proceso de integración a lo largo de casi 60 años ha sido dificultoso por fuertes resistencias internas que consideraban estas asociaciones como desventajosas. “Hoy se hace realidad algo que por 60 años se venía hablando pero no se daba”, dijo el presidente de Guatemala cuando se firmó la unión aduanera. “La unión de nuestros territorios brindará beneficios a nuestros pueblos”.
Según un documento firmado por los ministerios de Economía de Guatemala y Honduras, la unión consolida un espacio único de 44% del territorio centroamericano (221.281 km2), 53% de la población regional (24,12 millones) y 35% de la producción regional (u$s 72.780 millones).
La Cepal afirma en un documento que la unión aduanera permitirá a Guatemala un crecimiento de 1% adicional de su producto interno bruto (PIB) y de 1,6% en sus exportaciones y que Honduras tendrá un incremento de 1,2% en su crecimiento económico y de 2,4% en sus exportaciones. Y anticipó que Guatemala podría obtener un aumento en la recaudación fiscal de entre u$s 23,1 millones y u$s 40,2 millones, mientras Honduras incrementaría su recaudación entre u$s 20,8 millones y u$s 36,7 millones. Y según datos de la ONU, Honduras y Guatemala intercambiaron en el 2015 casi u$s 1.300 millones, de los cuales u$s 903,4 millones corresponden a exportaciones guatemaltecas y u$s 366,6 millones a ventas hondureñas.
Mientras Cepal muestra esos alentadores datos ante las crónicas dificultades de la región para alcanzar su desarrollo, el presidente de EEUU en uno de sus arrebatos habituales, dijo la semana pasada que países como El Salvador, Guatemala, Honduras, México, “no son nuestros amigos. Pensamos que son nuestros amigos, y les enviamos ayuda masiva… les enviamos mucha ayuda y están enviando droga a nuestro país y se están riendo de nosotros”. Y amenazó con retirarles toda ayuda económica.
Ya Trump se había desbocado a comienzos de enero, cuando le planteó a un grupo de legisladores, según el Washington Post: “Por qué tenemos a toda esta gente de países como El Salvador, Nicaragua, Haití y Sudán (que son un) agujero de mierda, viniendo aquí?”.
En ese contexto, a la región le queda ahora por resolver la renegociación del TLC que mantiene con EEUU (DR Cafta -Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y República Dominicana) gracias al cual EEUU logró revertir un déficit comercial de más de u$s 1.000 millones que mantenía en 2005 con los países firmantes del acuerdo, para convertirlo en un superávit que, en 2016, alcanzó los u$s 5.418 millones.
FUENTE: MÉXICOXPORT
