El cruce de vehículos y personas ha repuntado en los puentes internacionales de El Paso-Ciudad Juárez, luego de que a principios del 2017 los medios de comunicación reportaran menos movimiento a raíz de la entrada del presidente Trump.
Sin embargo, gracias a una saludable actividad comercial en la industria maquiladora y a medidas de gestión del tráfico por parte de la Aduana estadounidense, el número de personas que día a día cruzan la frontera es cada vez mayor, según expertos y autoridades federales.
De acuerdo a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), los cruces fronterizos de esta región superaron los 29 millones en el 2017, un incremento del 2.5 por ciento en comparación al año anterior, mientras que hace dos años, en el 2015, se registraron 27 millones 993 cruces.
Esta es una tendencia que parece sustentarse a largo plazo y que tiene que ver con el crecimiento tanto poblacional como económico de la región. El área metropolitana de El Paso-Las Cruces-Ciudad Juárez, por ejemplo, cuenta ahora con un total de 2.7 millones de habitantes.
Menos tiempos de espera… para algunos
CBP en años recientes ha puesto en marcha diversas políticas de gestión para acomodar el creciente flujo de vehículos y personas en los cruces internacionales.
Estas medidas incluyen documentos migratorios con tecnología de ‘chip’ que ahorran tiempo a los inspectores en las garitas de los puentes al momento de verificar la identidad e historial del portador.
En cuanto al flujo de vehículos, el Gobierno estadounidense ha promovido el uso de la línea SENTRI (o línea exprés), que ya cuenta con decenas de miles de usuarios en la región, y más recientemente las líneas Ready Lane, para uso de automovilistas con documentos con la tecnología de ‘chip’.
El Ayuntamiento de El Paso también ha contribuido a facilitar el flujo de viajeros binacionales, utilizando ingresos de las cuotas de salida recabadas en los puentes de su propiedad (el Santa Fe y el Ysleta-Zaragoza) para pagar las horas extras a los agentes del CBP que mantienen abiertas garitas de revisión que de otra forma permanecerían cerradas.
De la misma manera expertos en economía atribuyen el aumento de cruces a la actividad económica de las maquilas en Ciudad Juárez, que sostienen más de 50 mil trabajos directos en El Paso.
De acuerdo con el Banco de la Reserva Federal en Dallas, El Paso es una de las ciudades fronterizas que más se beneficia de la actividad en la maquila y el grueso del impacto se encuentra del lado del servicio de la economía.
“A medida que el sector industrial estadounidense se mantiene optimista, las maquiladoras de México continúan produciendo empleos a los dos lados de la frontera. El empleo manufacturero de Juárez totalizó más de 272 mil 300, un aumento del 4.4 por ciento respecto al año anterior”, según Marycruz de León, del Banco de la Reserva Federal en Dallas, quien realizó un estudio económico al respecto publicado el 27 de diciembre del 2017.
Según un reporte del centro internacional de análisis de políticas públicas Woodrow Wilson Center, toda la región fronteriza –que incluye El Paso, Ciudad Juárez y Las Cruces/Santa Teresa (Nuevo México)– se beneficia del crecimiento y buen estado del sector maquilador, con actividades de apoyo como logística, servicios legales y financieros y también del fomento de sectores como defensa, salud, turismo y educación.
Alex Valdez, experto en asuntos fronterizos de la Universidad de Texas en El Paso, afirma que la seguridad en la frontera es una materia crucial para el buen desempeño económico en las zonas transfronterizas.
“La puesta en marcha de protocolos binacionales de prevención de la violencia en la frontera, el desarrollo de una red conjunta de comunicaciones sobre seguridad transfronteriza, o esquemas como el de las tarjetas de cruce rápido para viajeros frecuentes, por citar algunas, contribuyen al movimiento de personas a través de la frontera”, dijo Valdez.
FUENTE: EL DIARIO DE EL PASO
