Los sectores textil, acerero, automotor, electrónico y telecomunicaciones están interesados en subir su contenido de insumos regionales para exportación, dice Eugenio Salinas, del cuarto de junto de la IP.
Sectores mexicanos como el textil, acerero, automotor y autopartes, electrónico y telecomunicaciones alzaron la mano para incrementar el porcentaje de reglas de origen en la región de Norteamérica y sustituir importaciones de Oriente, como lo planteó el gobierno de Donald Trump en sus lineamientos para la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Para el sector industrial mexicano es “muy acertada” la propuesta de incrementar el contenido estadounidense y regional de los productos en el marco de la renegociación del TLCAN, con lo cual “debemos estar tranquilos, los tres países (México, Canadá y Estados Unidos), de que vamos a procurar que haya mayor integración y contenido regional de lo que consumimos entre nosotros”, destacó Eugenio Salinas, representante del cuarto de junto de los integrantes de la Iniciativa Privada (IP).
En entrevista con El Economista, el especialista en comercio exterior dijo que la mención del presidente de Estados Unidos de producir con insumos de la región genera una oportunidad para la industria mexicana, pues algunos sectores han demostrado que con más tecnología han dejado de comprar en otros países como China.
El también presidente de la Comisión de Comercio Exterior de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) comentó que dentro del análisis realizado al interior del sector privado, como parte de las reuniones del cuarto de junto e Inteligencia, es plantear a las cámaras y asociaciones empresariales sobre algunos productos en particular y cuestionar de dónde se proveen de insumos, si consideran oportunidades para sustituirlos, con qué tipo de tecnología cuentan para reconvertirse y si existe abasto.
“Nuestra sorpresa es que en un análisis se ha encontrado en diversos sectores que eso (elevar contenido regional) será posible y que justamente la tecnología permite que mucho se haga en la región”, reveló Eugenio Salinas.
Aunque expresó: “(Por el momento) no tengo cifras ni porcentajes, ahorita se concentra en análisis de hasta dónde pueden modificar sin verse presionados. No hay contabilización de lo que sucede”. Sin embargo, en la proveeduría en el automotriz y el eléctrico es donde se verán oportunidades de sustituir importaciones y ese producto asiático sea desplazado para producirse en la región.
“Como sector privado se esperará a la primera ronda para analizar aspectos puntuales. Ahorita es qué quieren o pretenden (los negociadores estadounidenses) y después es cómo se hará”, respondió.
El representante del cuarto de junto y también presidente de la Comisión de Comercio Exterior de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos calificó como “una gran noticia” los puntos planteados y que no haya aranceles, que era un tema delicado, y que a partir de los lineamientos serán para incrementar la relación comercial; porque regresar a aranceles hubiera sido retroceder.
Sobre el anuncio de Washington de pretender concluir este año la ronda de negociaciones con siete reuniones a partir del próximo 16 de agosto, respondió que manda una señal de certidumbre, porque el tiempo se aprovechará desde el primer minuto. “No obstante, el compromiso es que vamos a privilegiar el contenido contra el tiempo, pero hay una idea de que no contamine de los procesos políticos de ambos países, si se llega a concluir con siete rondas de negociación cada tres semanas. Insisto: vamos a privilegiar el fondo y contenido más que los tiempos. La certidumbre se dará con los detalles y prontitud que se den los mensajes”, dijo.
Fuente: El Economista
